viernes, 8 de noviembre de 2013

FInales de serie (III)

"Los Soprano"



“Seguro que ni lo oyes cuando pasa”

Lo primero de todo es que el artículo está plagado de SPOILERS, así que el que no haya visto la serie que se abstenga de leerlo y que no pierda más el tiempo en ver una de las obras maestras, por fortuna, con las que nos ha obsequiado la pequeña pantalla, que desde finales de la década pasada no deja de ofrecernos productos de una calidad extraordinaria.

No creo que pueda aportar algo que no se haya dicho ya sobre este impresionante retrato de las dos familias, la criminal y la sanguínea, del hombre más odiado y amado al mismo tiempo del tubo catódico, el señor Anthony Soprano. Tony, como le conocen sus amigos y familiares, es un hombre que, tras una discusión con su temperamental madre Livia, empieza a sufrir ataques de pánico, por lo que comienza a visitar a una psiquiatra, la doctora Jennifer Melfi. Así es como se da inicio a una de las mejores series de la historia.


Pero aquí vamos a hablar de su polémico final, porque si había algo que intrigaba mucho a los espectadores, cuando aún se emitía esta serie en el 2007, era cómo tenían pensado sus creadores darle un digno final a una serie que lo había conseguido todo, y que lo único necesitaba era un buen remate para que entrara en el Olimpo de esas grandes obras de arte que, pasen los años que pasen, siempre maravillan a una generación tras otra.

¿Y cuál era ese final que todo el mundo se moría por ver? Pues como era algo típico en la serie, y uno de los sitios donde los personajes pasan más tiempo, la escena final tiene lugar en un bar restaurante. Toda la familia al completo ha quedado allí para cenar, y el primero en llegar es Tony. El gran hombre se sienta en una mesa con una radio, en la que sintoniza “Don’t stop believin” de Journey. Cuando empieza la canción, suena la campana de la puerta y llega Carmela, su mujer, y para sorpresa de su marido, sin AJ, el hijo menor. Tony le cuenta que Carlo Gervasi, un miembro de la organización de Tony, va a testificar, lo cual podría terminar con él en la cárcel. Un poco después, vuelve a sonar la campana y llega AJ al mismo tiempo que un misterioso hombre del que la cámara siempre está pendiente, incluso cuando se sienta en la barra a pedir. Por otro lado, Meadow, la hija mayor, está fuera intentando aparcar, algo que no consigue a la primera, ni, más tarde, una segunda vez. AJ se sienta con sus padres y les cuenta cómo le va su nuevo trabajo en la productora pornográfica de un amigo de su padre. Por primera vez AJ se muestra contento y esperanzado desde hace varios años, aunque sólo lleve cafés para unos y otros. Mientras, se nos muestran diferentes personas que hay en el bar: un camionero, unos boy scouts, un par de jóvenes negros… El hombre de la barra se va hacia el baño, lo cual nos hace sospechar del parecido con cierta escena de “El padrino”. AJ habla de recordar los buenos momentos, lo cual agrada especialmente a sus padres. Fuera, Meadow consigue aparcar a la tercera, y sale corriendo hacia el bar. Dentro, Tony sigue comiendo, la campa suena y éste parece echarse la mano al bolsillo cuando la pantalla corta a negro durante 11 segundos, en los que no se ve ni oye nada, y después, aparecen los títulos de crédito.


Lo primero que pensé, y como luego vi en varias páginas de internet no fui el único, es que la señal de la televisión se había ido o que se me había estropeado el reproductor de dvd. Para nada. David Chase había decidido que así tenía que acabar la obra que tantas alabanzas y premios le había reportado.

¿Y qué quiere decir ese abrupto corte a negro? No seré yo el que diga que está bastante claro, porque es imposible captar la multitud de pistas y detalles con los que nos inunda Chase para que sepamos cuál es el final en el primer visionado, ni quizá un segundo o incluso un tercero. Tras visitar multitud de páginas y vídeos llegué a la conclusión (personal) de que Tony muere, y, a continuación, expondré las razones de por qué es así:

  - En el capítulo “Películas caseras de los Soprano”, Tony y su cuñado Bobby mantienen una charla sobre la muerte. El segundo le dice al primero la frase que encabeza este artículo respecto a lo que le ocurre a uno cuando fallece, frase que vuelve a salir en el final del capítulo que precede al último de la serie.


   - En el capítulo “Estadio 5”, durante una cena que mantienen Silvio Dante, consiglieri de Tony, y Gerry Torciano, miembro de la familia de Nueva York, el segundo es asesinado por varios disparos, pero Silvio, que está delante de él, no se entera de lo que pasa hasta que la sangre le inunda el rostro.

  - La escena favorita de toda la historia del cine de Tony Soprano es aquella en la que un joven Michael Corleone asesina a dos enemigos con una pistola que previamente había recogido en el baño, en “El padrino”, muy referenciada en la serie . En la escena final, el misterioso hombre que no deja de mirar a los Soprano también se dirige al baño con no sabemos qué propósito.

  - El mismo hombre el que hablábamos en el párrafo anterior está acreditado como “el hombre con la chaqueta members only”. Hay que recordar que “Members only” es el primer capítulo de la sexta temporada, en el que Tony sufre un segundo intento de asesinato por parte de su propio tío, Corrado Junior Soprano.


 - Meadow intenta aparcar dos veces pero no lo consigue hasta la tercera. Tony ha sufrido dos atentados que a punto estuvieron de acabar con su vida: el mencionado antes, y el primero a manos de dos jóvenes negros (similares a los que se ven en la escena final), pero que estaba orquestado también por su tío, y por su madre, Livia. ¿Esto significa que ahora Tony va a sufrir otro ataque, y que a la tercera va la vencida?

 - Siguiendo con esta teoría, no creo que el misterioso hombre de la chaqueta "Members Only" sea familiar de Phil Leotardo, como he visto en muchos foros, sino que es pariente de Eugene Pontecorvo, uno de los hombres de Tony, que se quitó la vida al ver que no iba a poder dejar la vida de mafioso, ya que su jefe no lo veía con buenos ojos. Entre esto y las presiones de su mujer y que el FBI ya le había captado, Gene no veía otra salida posible. Al principio lo pensé porque  el hombre de la chaqueta me recordaba fisicamente a Gene, pero es que justamente, el capítulo en el que se suicida es "Members Only", y en dicho capítulo, llevaba una chaqueta de la misma marca en el momento en el que va a cometer su último asesinato. ¿Casualidad? Yo creo que David Chase no ha dejado nada al azar.


Todos estos motivos me parecen suficientes para creer que Tony acabará durmiendo el sueño de los justos en esos once segundos en negro, cosa que hay que agradecer al director y creador David Chase. Porque para qué vamos a mentirnos: ¿quién quiere ver a Tony con una bala en la cabeza después de todo lo que nos ha hecho vivir?


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