"Quantum of Solace", entretenida pero descafeinada aventura

"Creo que estás tan cegado por una rabia inconsolable que te da igual a quien te lleves por delante. Cuando no distingues entre amigos y enemigos, hay que dejarlo."

“Quantum of Solace” es la película número 22 de la saga Bond y supone una continuación directa de la anterior película, la impresionante “Casino Royale”. Para desgracia nuestra, “Quantum of Solace” se aleja de todos los logros que consiguió su predecesora, obteniendo así una película ligera, entretenida, pero sin garra ni alma.

La película comienza unas pocas horas después del fatídico final que vimos en “Casino Royale”, y será a lo largo de esta cinta donde Bond buscará y encontrará respuestas a todas aquellas preguntas que quedaron en el aire, y también descubriremos por qué Bond está herido. Herido y furioso como no habíamos visto nunca.

Uno de los logros más comentados que tuvo el reinicio de la saga fue otorgarle una dimensión más humana al impasible agente británico, por lo que le vemos recibir un golpe tras otro, sangrar, sudar, correr, y amar. Y de esta manera logramos entender y conocer el origen de esa especie de barrera que interpone Bond con las mujeres, tratándolas como meros objetos para no caer más en sus brazos. De hecho, ésta es una de las pocas cosas rescatables de la película, porque en el resto falla estrepitosamente, cosa que aún se nota mucho más cuando su anterior entrega es una de las mejores películas de acción de la década (siendo modestos).

Hay que decir que la película tuvo una producción difícil, siendo numerosas las veces que hubo que reescribir el libreto, y cómo la huelga de guionistas afectó al desarrollo de la misma, siendo el propio Daniel Craig, interprete de Bond, quien tuvo reescribir algunas escenas. Esto podría explicar el poco interés que despierta la trama de “Quantum of Solace”, ya que ni siquiera nos interesa averiguar qué fue lo que llevó a Vesper a actuar como lo hizo en la anterior película.

No puedo decir que la película resulta aburrida, porque la verdad es que es bastante entretenida, pero no pasa de ahí. Recuerda a las películas de la saga con Pierce Brosnan, que también resultaban entretenidas, pero carecían de todos los elementos que hacen buena una obra, y ese mismo fue el motivo por el que los productores apostaron por un reinicio. Por todo esto podemos decir que “Quantum of Solace” es un evidente fracaso por el paso atrás que supone en este nuevo lanzamiento.

Respecto al reparto, hay que destacar a ese recién descubierto héroe de acción que es Daniel Craig, cuya interpretación es lo mejor de una película en la que todos parecen estar perdidos menos el agente británico. Una vez más, y como se verá en “Skyfall”, su compromiso es encomiable. Como chicas Bond se encuentran las discretas Olga Kurylenko y Gemma Arterton, siendo el personaje de la segunda quien realiza un explicito homenaje a una de las antiguas entrega de la saga. Como villano de turno está Mathieu Almaric, que ni inquieta, ni logra hacerse temer, ni nada. Repiten tras “Casino Royale” Judi Dench, Giancarlo Giannini, Jesper Christensen y Jeffrey Wright. Importante también mencionar la breve aparición del español Fernando Guillén Cuervo como militar.

En la silla del director se encuentra el alemán Marc Forster, que consiguió el éxito en dramas como “Monster’s Ball” o “Descubriendo Nunca Jamás”, y aquí hizo su primera incursión en el género de acción. No podemos decir que sea un mal director de escenas de acción, pero lo malo es que está tan preocupado con dichas escenas que apenas se presta atención a la endeble historia que hay detrás de ellas.

En cuanto al guión, aparte de los problemas que se propiciaron por la huelga de guionistas, es una pena que el magnífico trío de escritores que se encargó de "Casino Royale", Neal Purvis, Robert Wade y Paul Haggis, haya desarrollado un libreto que se supone una continuación, pero que carec ede todos los elementos de su predecesora. Una lástima viendo el potencial que tenía la venganza de James Bond.

En resumen, es una entretenida cinta de acción pero que flaquea mucho debido a la altura del listón que se esperaba de este reinicio de saga, y que tan buenos resultados dio con “Casino Royale”.